Cirugía del pie

La cirugía del pie es la herramienta con la que contamos para corregir las deformidades del pie que provocan dolor y limitación funcional en el paciente, buscando una solución definitiva para sus problemas.

Las intervenciones que realizamos en el pie las dividiremos en procedimientos de cirugía menor en consulta y procedimientos de cirugía mayor ambulatoria, que realizaremos en nuestros centros hospitalarios de referencia.

Estamos especializados en cirugía osteoarticular como, por ejemplo:

  • Hallux Abductus Valgus (juanetes)
  • Juanete de sastre
  • Dedos en garra
  • Metatarsalgias
  • Espolón calcáneo
  • Exóstosis y deformidades óseas
  • Pie plano infantil y del adulto

Nuestro objetivo es dar al paciente la máxima funcionalidad que sea posible, manteniendo una imagen estética favorable, por lo que cada procedimiento se diseña teniendo en cuenta las necesidades del paciente.

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Cirugía de HAV (Juanetes)

El Hallux Abductus Valgus también conocido como juanete es una deformidad ósea en la articulación metatarsofalángica del primer dedo del pie que se caracteriza por la formación de una protuberancia ósea (bunion) y que provoca dolor que empeora al caminar.

También puede aparecer inflamación y enrojecimiento en la zona debido al roce con el calzado. Es más frecuente en mujeres por el uso de tacón y zapatos demasiado estrechos.

¿Qué provoca los juanetes?

No existe una causa exacta que determine su aparición, pero sí existen una serie de factores predisponentes:

  • Alteraciones biomecánicas
  • Enfermedades autoinmunes.
  • Enfermedades neuromusculares.
  • Uso de calzado inadecuado.
  • Alteraciones morfológicas óseas.
  • Traumatismos.
  • Factores genéticos o hereditarios.

Cuáles son las opciones de tratamiento?

Las opciones de tratamiento dependen del grado de deformidad y limitación que provoca. Dentro de los tratamientos conservadores podemos incluir el uso de calzado adecuado, soportes plantares a medida, así como tratamientos de fisioterapia o ejercicio dirigido.

En aquellos casos en las que estas medidas fracasan, se propone el tratamiento quirúrgico como solución definitiva.

Existen gran cantidad de opciones quirúrgicas, incluyendo en este campo la Cirugía Mínimamente Invasiva (comúnmente llamada laser) en la que a través de pequeñas incisiones se realiza todo el procedimiento, en la que no es necesario suturar la piel y el paciente sale caminando del quirófano y no requiere ingreso hospitalario.

En aquellos casos en los que es necesario utilizar material de osteosíntesis, nuestro equipo utiliza técnicas de cirugía plástica como la sutura intradérmica reabsorbible para minimizar las cicatrices resultantes, mejorando el resultado estético.

La elección de una técnica u otra dependerá de las características del paciente y de la evaluación por parte del profesional que diseñará la intervención de forma completamente personalizada.

Hallux Rigidus

El Hallux Rígidus es una alteración del primer dedo, que se caracteriza por la limitación del movimiento de flexión dorsal del dedo, así como la aparición de dolor durante la marcha o la carrera.

Es una alteración más frecuente en hombres, secundaria a enfermedades articulares como la Gota, o a la práctica de deportes de impacto como el futbol. Se producen cambios degenerativos que producen un proceso artrítico en primer lugar y artrósico con el paso del tiempo.

Esta enfermedad se puede tratar antes de que se produzca la degeneración articular mediante soportes plantares, fisioterapia o tratamientos como la infiltración de ácido hialurónico o Plasma rico en factores de crecimiento (PRP), reservando el tratamiento quirúrgico para aquellos casos en los que estos fallan.

Metatarsalgia

La metatarsalgia es el dolor que se produce en la zona inmediatamente debajo de los dedos, normalmente asociado a la aparición de durezas en la zona y que se relaciona con un aumento de la presión provocada por distintas causas. Este dolor aparece sobre todo en la última fase de la marcha al levantar el talón del suelo o cuando caminamos de puntillas o descalzos.

Este dolor puede ser punzante, con sensación de quemazón o eléctrico y cada tipo de dolor se relaciona con una alteración diferente.

Esta alteración puede tener causas diferentes como pueden ser el aumento de la actividad física, deformaciones digitales en los dedos o el uso de calzado inadecuado como puede ser un zapato muy estrecho o con tacón excesivo.

EL tratamiento variará en gran medida dependiendo de cuál sea la causa del problema, aunque podemos destacar la adaptación de soportes plantares a medida, la prescripción de zapato adecuado, la infiltración de la zona dañada o en los casos en los que está provocado por una deformación del dedo, la corrección quirúrgica.

Dedos en garra

El dedo en garra es una deformación de los dedos que ocurre cuando pierden su forma recta y alineada a causa de un desequilibrio de la musculatura. Si este desequilibrio no se corrige, acabará provocando la deformación rígida.

Las causas que desarrollan esta patología pueden ser de origen congénito, neurológico, muscular, articular o debido a alteraciones biomecánicas.

Un pie cavo o un pie plano pueden dar lugar a diferentes variantes de los dedos en garra.

El uso de calzado inapropiado es el principal factor desencadenante de la deformidad como son un zapato de punta estrecha o tacón, por lo que el utilizar un zapato adecuado a nivel biomecánico es imprescindible para frenar la evolución.

Es una alteración más frecuente en hombres, secundaria a enfermedades articulares como la Gota, o a la práctica de deportes de impacto como el futbol. Se producen cambios degenerativos que producen un proceso artrítico en primer lugar y artrósico con el paso del tiempo.

Esta enfermedad se puede tratar antes de que se produzca la degeneración articular mediante soportes plantares, fisioterapia o tratamientos como la infiltración de ácido hialurónico o Plasma rico en factores de crecimiento (PRP), reservando el tratamiento quirúrgico para aquellos casos en los que estos fallan.

¿Cuáles son los signos y síntomas?

En el comienzo de la deformidad, hay algunas señales que podemos identificar como son:
  • Aparición de helomas (callos) en el pulpejo y en el dorso del dedo debido a la fricción y roce con el calzado.
  • Dolor al caminar que se intensifica a la hora de hacer deporte.
  • Inflamación de la articulación.

¿Cuáles son las opciones de tratamiento?

Para frenar la aparición o paliar sus efectos podemos utilizar los siguientes tratamientos:
  • Uso de férulas de silicona para disminuir la fricción con el zapato
  • Uso de plantillas a medida para corregir las alteraciones biomecánicas
  • Tratamientos de fisioterapia
  • Infiltraciones con PRP, ácido hialurónico o corticoides cuando esté indicado
  • Uso de calzado fisiológico
En aquellos casos que los tratamientos conservadores fracasan, se plantea tratamiento quirúrgico para dar una solución definitiva al problema.

Helomas interdigitales (ojos de gallo)

El heloma interdigital o lo que comúnmente se conoce como “ojo de gallo” es un tipo de heloma (callo) que se localiza entre los dedos de los pies con más frecuencia entre el cuarto y el quinto dedo.

En este caso el heloma se produce por la presión que se realiza entre los relieves óseos de un dedo y el adyacente, provocando la formación de la dureza como mecanismo de defensa de la piel.

El diagnóstico definitivo de cuáles son las estructuras afectadas requiere del estudio radiológico o fluoroscópia.

El principal síntoma es el dolor punzante que se produce al caminar o cuando se utiliza un zapato estrecho.

¿Cuáles son las opciones de tratamiento?

Existen varios tratamientos para paliar los efectos de estas deformaciones, entre los que se encuentran la quiropodia, el uso de férulas de silicona o la utilización de calzado de pala ancha, que dan un periodo variable de alivio sintomático.

En aquellos casos en los que este periodo de alivio es corto o bien provoca una limitación importante de la calidad de vida del paciente, recurrimos a procedimientos de cirugía mínimamente invasiva para remodelar los huesos que provocan el dolor.

Este procedimiento se realiza de forma ambulatoria, con incisiones milimétricas y retomando el paciente de inmediato sus actividades habituales.

Ecografía intervervencionista

Atrapamientos del túnel tarsiano

El atrapamiento del túnel del tarso se trata de un dolor muy característico de tipo calambre, quemazón o adormecimiento que a veces se acompaña de irradiación hacia la planta del pie.

Aumenta al caminar y puede intensificarse por la noche, disminuyendo con el reposo.

El túnel del tarso o túnel tarsiano es una zona anatómica que se encuentra en la zona interna del tobillo, por donde pasa un paquete vasculonervioso.

La compresión mantenida en el tiempo del nervio tibial de algunas de sus ramas a su paso por esa zona, justo debajo de un ligamento llamado retináculo flexor.

Esta compresión puede producirse por diferentes causas como son:

  • Procesos inflamatorios
  • Lesiones traumáticas como fracturas, esguinces, coaliciones tarsales;
  • Enfermedades sistémicas;
  • Deformidades como pies planos o valgos que probocan la lesión del tendón del músculo tibial
  • Tumores

Para dar un diagnóstico definitivo la exploración clínica es fundamental, además de la realización de algunas pruebas complementarias como pueden ser el estudio mediante RMN, la ecografía o la realización de test en consulta como el test de supresión.

En lo referente al tratamiento, una vez que han fracasado las medidas conservadoras, en tratamiento de elección es la liberación del túnel tarsiano proximal y distal mediante cirugía ecoguiada o ultra-minimamente invasiva.

Mediante la realización de incisiones de 2 milímetros y bajo control ecográfico se liberan las estructuras que comprimen el nervio, consiguiendo una mejoría de los síntomas y acelerando la recuperación provocando un mínimo trauma a la zona.

Neuropatía de Baxter

La neuropatía de Baxter es otro atrapamiento nervioso de la primera rama calcánea o nervio de Baxter del nervio tibial, que provoca dolor en la zona interna de la planta y que se puede confundir con fascitis o con otro tipo de dolores en el talón.

Este atrapamiento puede ser debido a alteraciones biomecánicas, hipertrofia de la musculatura relacionada o incluso tumores que puedan provocar la compresión.

Hasta un 20% de los dolores de talón que no responden al tratamiento pueden ser debidos a la compresión de este nervio.

El diagnóstico de esta patología puede ser complejo, aunque la ecografía como método diagnóstico mejora la precisión, pudiendo realizarse la infiltración con anestésico de esta rama especifica (test de supresión).

Dentro de los tratamientos para esta alteración están la radiofrecuencia, las infiltraciones ecoguiadas con corticoides o la liberación ultra-minimamente invasiva.

Neuroma de Morton

El neuroma de Morton es una degeneración del nervio interdigital que se acompaña de una fibrosis de la capa externa del nervio.

Este aumento de volumen provoca la compresión del nervio, lo cual genera un dolor muy característico en la zona de las cabezas metatarsales, que en ocasiones irradia hacia el tobillo.

Aunque la localización mas frecuente es entre en tercer y el cuarto dedo, puede aparecer en cualquier espacio interdigital.

¿Cuáles son los síntomas de un neuroma?

El síntoma más característico de un neuroma es el dolor “eléctrico” o de “quemazón” que aumenta por la tarde, después de estar mucho tiempo de pie o cuando se utiliza un zapato de punta estrecha
Determinadas actividades que requieren ponerse de puntillas como el baile, el pádel o el uso de tacones aumentan ese dolor.

El diagnóstico de un neuroma vendrá dado por los test clínicos que se realizan en consulta, ya que hasta 1 de cada 3 casos pueden cursar sin alteraciones en las pruebas de imagen, aunque la ecografía y la resonancia magnética pueden ayudarnos en aquellos en los que la lesión tiene un volumen mayor.

¿Cuáles son los tratamientos de elección?

El tratamiento debe ir encaminado a reducir la presión que se produce en el espacio interdigital, para lo cual se debe realizar un estudio biomecánico y la adecuación del calzado que se utiliza.

La fisioterapia de cara a mejorar la elasticidad de la musculatura del pie y el efecto antiinflamatorio también nos pueden ayudar a disminuir la sintomatología.

También encaminado a disminuir la inflamación podemos encuadrar los tratamientos mediante infiltraciones, que tienen hasta un 70% de efectividad.

En aquellos casos en los que fracasa el tratamiento conservador, tenemos diferentes opciones de tratamiento quirúrgico o invasivo como son:

  • La liberación del ligamento intermetatarsiano mediante cirugía ecoguiada.
  • La radiofrecuencia del nervio interdigital.
  • La cirugía abierta de liberación del nervio o resección del mismo en aquellos casos que no sea posible la intervención ecoguiada.

Fascitis plantar

La fascitis plantar es una inflamación de la fascia plantar, una banda de tejido elástico que va desde el calcáneo (hueso localizado en el talón) hasta la zona metatarsal (debajo de los dedos).

Se caracteriza por un dolor matutino intenso que disminuye a lo largo del día y con el reposo. Es una patología bastante frecuente en deportistas y corredores. No obstante, también puede aparecer en personas que no practiquen deporte. Existen estudios que afirman que un 10 % de la población la puede padecer en algún momento de su vida.

Se encuentra una relación directa entre la fascitis plantar y el acortamiento de la musculatura posterior de la pierna, siendo común su aparición en mujeres que usan de forma continuada zapato de tacón.

En cuanto a la pisada y el tipo de pie, existe mayor posibilidad de sufrir esta patología en pies cavos, pies valgos y pies con tendencia a la pronación debido a un aumento de tensión por una disminución del apoyo.


 

Contamos con múltiples tratamientos para esta afección que variarán en función del tiempo de evolución. En la fase aguda puede controlarse con antiinflamatorios y ejercicios de fisioterapia además de un estudio de la pisada para valorar si hay relación con la forma de caminar del paciente. En caso de que exista relación se recomienda la realización de plantillas personalizadas para controlar el problema.

También puede recurrirse a la medicina regenerativa mediante la infiltración de plasma rico en factores de crecimiento (PRP) que acelere la cicatrización y la regeneración de los tejidos.

Cuando la fascitis plantar tiene un gran período de evolución y el tratamiento conservador ha fracasado sigue habiendo solución al problema gracias a los nuevos avances de la cirugía. Una de las opciones es la ecografía intervencionista, permite la liberación de la fascia de forma ecoguiada a través de cirugía mínimamente invasiva. Otra opción es llevar a cabo la intervención mediante cirugía percutánea o mínimamente invasiva con control fluoroscópico.

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